Menos del 10% de los ludópatas busca tratamiento: la importancia de detectar a tiempo

El trastorno del juego o ludopatía es una enfermedad que suele pasar desapercibida entre usuarios de casinos y plataformas de apuestas en línea. Como consecuencia de su escasa detección, quienes lo padecen no reciben una atención oportuna a tiempo.

La ludopatía tiene una serie de consecuencias que van desde problemas de salud, emocionales, económicos, sociales, ocupacionales e incluso físicos. Por esta razón, es fundamental poder detectarla con anticipación, pues es una forma accesible de concientizar y ayudar a quienes la padecen.

Por ello, como una forma de concientizar sobre los daños del juego, entregar apoyo a quienes sufren este trastorno y motivar la detección de la ludopatía, cada segundo martes del mes de marzo se conmemora el Día de la Detección del Trastorno del Juego. En esta ocasión, la fecha será el 14 de marzo y el patrocinador de la jornada será el Centro Internacional para el Juego Responsable (ICRG), institución que ha apoyado e impulsado diversos recursos para educar a las personas y combatir la ludopatía.

El evento fue creado en 2014 por la División de Adicciones del Cambridge Health Alliance, hospital universitario de la Facultad de Medicina de Harvard. Anualmente esta convocatoria recibe el apoyo de voluntarios y examinadores de Cambridge Health Alliance, Massachusetts y Nueva Inglaterra, Estados Unidos y todo el mundo. Gracias a esta instancia se ha podido identificar a personas que podrían padecer un trastorno de juego, y que deberían someterse a una evaluación.

Regulación en Chile

Una de las medidas que contribuirá con el combate al trastorno del juego es el proyecto de ley sobre regulación de las plataformas de apuestas en línea, que se encuentra en discusión en la Cámara de Diputadas y Diputados.

Según el abogado Carlos Baeza, representante de las plataformas de apuestas Betano,  Betsson, Coolbet y Latamwin, la legislación busca establecer una esfera de protección para los usuarios y usuarias. “El proyecto establece que el 1% de los ingresos brutos anuales se destinen a la promoción del juego responsable y prevención de la ludopatía. Hoy los jugadores pueden autoexcluirse o limitar sus tiempos de juego y de apuestas. La regulación nos permitirá mantener una base de datos más robusta entre todas las plataformas de estos usuarios”, señaló Baeza.