Los lentes no son tan caros como dicen las ópticas
En relación a la posibilidad de declarar inconstitucional el acto de recetar lentes en ópticas por parte del TC, desde Tecnología Médica de la Universidad Central consideramos que nuestra formación profesional apunta a velar por la salud de las personas y más específicamente la salud visual, previniendo la ceguera mediante el apoyo al diagnóstico clínico, […]
En relación a la posibilidad de declarar inconstitucional el acto de recetar lentes en ópticas por parte del TC, desde Tecnología Médica de la Universidad Central consideramos que nuestra formación profesional apunta a velar por la salud de las personas y más específicamente la salud visual, previniendo la ceguera mediante el apoyo al diagnóstico clínico, con exámenes de distinta complejidad. Desde este punto de vista, preocupan aquellas medidas que pongan como prioridad la adquisición de un lente óptico por sobre la evaluación oftalmológica profesional, ya sea por Tecnólogo Médico o un Médico Oftalmólogo.
Sería oportuno tener espacios de diálogo para evaluar las consecuencias que podría generar el acto de recetar ayudas ópticas en los mismos lugares donde se venden, ya que la tentación por el lucro al juntar la entrega de un servicio sanitario (prescripción de receta de lentes) con la venta de un producto (anteojos) se generaría tal conflicto de interés, que podría dar pie para que también se puedan recetar medicamentos en las mismas farmacias (prohibido en Chile por el mismo motivo).
Por otra parte, velando por el principio de accesibilidad para que las personas puedan contar con el recurso de lentes ópticos, preocupa el nivel de gastos que realizan los ciudadanos que necesitan lentes ópticos, ya que para fabricar un lente, las ópticas invierten en costos muy por debajo de lo que los chilenos pagan por comprar el mismo lente, es decir, las ópticas logran tremendas ganancias (Alrededor de 15 veces el valor de fabricación). En consecuencia, si preocupa el acceso, se debe trabajar en mejorar la competencia de las ópticas con el fin de beneficiar el bolsillo de los chilenos, tal como sucede en países como Perú o Inglaterra, en donde un lente óptico tradicional bordea los 30.000 pesos chilenos.
Gabriel Garay
Carrera de Tecnología Médica, U.Central