Bibliotecas Públicas: Un patrimonio cultural abierto para toda la comunidad

Por Natalia Ojeda Gaete

En el marco del Día de los Patrimonios conjuntamente con  el vínculo que se generó entre el equipo del programa radial con el recinto cultural, la directora interina de la biblioteca regional conversó en profundidad sobre la relevancia de las bibliotecas públicas y el impacto que generan en las comunidades.

La también periodista, explicó que pertenecen al Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas que es dependiente del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural y este a su vez es anexo del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y es la primera biblioteca regional construida desde la base para ser una biblioteca de estas características.

Además, agregó la directora, “el sistema nacional de bibliotecas públicas coordina bibliotecas públicas más pequeñas en espacios rurales a través de biblioredes que proveen de computadores y conexiones de internet.” Y este trabajo, es súper relevante porque facilita el acceso al conocimiento, “seamos bibliotecas grandes o pequeñas, estamos todos trabajando en torno a facilitar el acceso al conocimiento, a la información, a la entretención y al desarrollo de todas las capacidades que se generan a través de la lectura”, añadió.

Para Paloma Soto, la lectura y el fomento lector son fundamentales en la labor que tienen como entidad pública, puesto que “desarrollan una serie de procesos neuronales que no se pierden con el tiempo”. Asimismo, y significativo a nivel social, es que entregan dignidad a las personas, “porque el foco está en que se desarrollen proyectos regionales y que todos puedan hacerlo sin verse retrasados o imposibilitados con no tener un lugar donde desarrollar sus trabajos”, valoró.

Respecto al nombre del inmueble, la periodista relató que el sitio perteneció a la educadora y poeta Gabriela Mistral, que lo adquirió “después de viajar a México, en un viaje especial que hizo para apoyar al gobierno de la época en el desarrollo de estrategias educacionales”.

La idea de la reconocida pedagoga chilena era crear una escuela-granja, sin embargo, su sueño no se hizo realidad. “De hecho, en la casa no vivió ella, sino que finalmente vivió la hermana y la mamá, pero ella venía a verlas. Después, el terreno quedó abandonado, pasó la historia, la casa tuvo distintos dueños y luego la Dibam solicitó este espacio en comodato para construir la biblioteca”, mencionó.

Si bien el proyecto de la escuela no prosperó, hoy el espacio se convirtió en una biblioteca pública de 5.200 metros cuadrados en el patio de su casa, en donde toda la comunidad puede acceder al conocimiento de distintas maneras. “Este es un espacio vivo donde la gente puede crear, encontrarse y ese es finalmente el sueño de Gabriela Mistral, que es generar un espacio donde las personas, independiente del lugar físico, social o económico de dónde vengan, puedan alcanzar un desarrollo”, aseguró.

Sobre algunas de las actividades que ofrece la Biblioteca Gabriela Mistral, el club de lectura es uno de los focos principales, ya que se genera una dinámica muy especial de retroalimentación entre los y las participantes.

“Nosotros leemos un mismo libro y ese libro se va comentando en un círculo de personas, donde se interpreta, se comenta, se dice qué te gusta, qué no y también se vincula con la vida personal. Y eso es súper importante, porque todas las lecturas te atrapan por algo que te hace un clic, te generan un recuerdo, una historia, una sensación que te desbloquea algo, una pregunta que tenías y te ayuda a solucionarlo”, ejemplificó la directora Paloma Soto.

Por ese motivo, es que el siguiente club de lectura estará dedicado al libro Con Mirada de Mujer 3 a cargo de Alejandra Riveros Martínez, directora de la carrera de Publicidad de la Universidad Central de Chile y conductora de CMM de la radio de la misma institución. La administradora del espacio público detalló que “se hizo una selección de relatos y vamos a ir trabajando un relato por sesión. La idea es leerlo, luego comentarlo, eventualmente conectarnos con alguna de las autoras o una persona desde la Universidad Central para que entregue su visión”.

Por último, Paloma Soto acotó que el club de lectura está enfocado a mujeres de cualquier edad y “la idea es cruzar nuestras experiencias en torno a esas historias y mantener el trabajo que desarrollamos con la U. Central en torno al género y también ir ampliando esa formación para la ciudadanía y para los habitantes de esta región que nos falta harto en esa materia”.

En palabras de Alejandra Riveros, «estamos muy contentos porque nuestra universidad tiene una sede en La Serena y se han generado lazos super importantes entre la Biblioteca Pública Gabriela Mistral y la Universidad Central».

Para más información sobre la actividad del club de lectura, escribir a infogmistral@bibliotecaspublicas.gob.cl