El ministro del Trabajo y Previsión Social, Patricio Melero, resaltó que, gracias al mayor crecimiento económico y el aumento de la recaudación fiscal, el próximo gobierno contará con US$ 4 mil 300 millones adicionales, lo que permitiría financiar en parte la Pensión Garantizada Universal (PGU).
Durante la jornada de hoy, la Comisión de Trabajo del Senado, donde se encuentra tramitando el proyecto de ley que crea la Pensión Garantizada Universal, expusieron el director del Instituto de Previsión Social (IPS), Patricio Coronado, y el ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda. Este último informó sobre los costos del beneficio, confirmó el financiamiento y agregó el dato sobre los fondos de libre disposición que contará la administración de Gabriel Boric.
“Quiero destacar esta nueva inyección de recursos, más de US$ 4 mil 300 millones producto del crecimiento. Estos son recursos que antes no estaban considerados y que podrían aportar al financiamiento de la Pensión Garantizada Universal”, dijo el ministro Melero en la sesión de la tarde, que contó con la exposición de la intendenta de regulación de la Superintendencia de Pensiones, Ursula Schwarzhaupt.
La Pensión Garantizada Universal implica un costo fiscal de 0,95% del PIB en régimen y se financia gracias a la modificación o eliminación de exenciones; la reducción del aporte obligatorio al Fondo de Reserva de Pensiones (FRP) y con la provisión destinada en el Presupuesto 2022.
“Esta es una pensión para todos los chilenos mayores de 65 años, salvo el 10% más rico. El 90% va a entrar a este beneficio. El gran universo de los 2 millones 100 mil beneficiados está dentro de ese 90%. Entonces, ¿quiénes entran? ¿con cuánto entran? Ahí se ve el valor de la pensión autofinanciada o base que se tenga, pero hasta $630 mil entran con el monto máximo”, dijo la autoridad a los parlamentarios ante las consultas sobre la herramienta de corte del beneficio.
Los integrantes de la comisión adelantaron que probablemente el próximo lunes continuarán con la discusión de la iniciativa.