Un estudio realizado por las carreras de Ingeniería en Administración de Empresas y Contador Auditor de la Universidad Central, reveló que el 55% de los chilenos esperaría los resultados de los primeros vacunados contra el COVID-19 antes de someterse a inoculación.
La encuesta denominada “Percepción del nivel de confianza de las vacunas contra el COVID-19”, recogió interesantes datos respecto de la inmediatez con que la población chilena reaccionaría ante la vacunación, revelando que, si bien más de la mitad de los encuestados decidiría esperar, un 36% se vacunaría lo más rápido posible y solo un 9% se resistiría a la vacuna.
Al respecto, el director de ambas carreras, Guillermo Fuentes, señaló que: “estos resultados vienen a dar cuenta de cierto nivel de dudas que hay en la población frente a la vacuna, aunque también reflejan que la gran mayoría de los chilenos si está dispuesto a vacunarse”.
De hecho, el académico agregó que de acuerdo al sondeo, el 63% cree que la vacuna debería ser obligatoria.
El estudio también abordó aspectos relativos a la percepción de efectividad de las vacunas de distintos laboratorios, contexto en el cual el 38,8% confía en BioNtech del laboratorio Pfizer; seguido de un 29,8% que se inclinó por AstraZeneca de la Universidad de Oxford. El 13,7% de los encuestados mostró preferencias por la vacuna rusa Sputnik V del Instituto Gamaleya; y el 9,7% lo hizo por Coronavac del laboratorio Sinovac.
En otros ámbitos, la encuesta arrojó que el 73,1% de las personas cree que la vacuna debería ser financiada solo por el Estado y que, sin considerar al sector Salud, los adultos mayores y la población de riesgo deben ser los primeros en ser inmunizados.
La medición se aplicó justo en momentos en que 10 mil dosis de la vacuna llegaron a Chile y se inició el proceso de inoculación entre los trabajadores de la Salud, entre los días 17 y 27 de diciembre; y abarcó una muestra representativa de al menos 12 regiones del país, aunque la gran mayoría se concentró en la Región Metropolitana.