Sin llegar a un acuerdo con el Gobierno terminó la huelga de hambre de 123 días que llevaban a cabo un grupo de ocho comuneros mapuche en Angol, medida que fue aplicada a petición de las familias y comunidades, debido al estado de salud de los comuneros, quienes habían visto su salud debilitada.
El vocero de los comuneros involucrados, Rodrigo Curipan dijo que: “se vienen movilizaciones que se van a intensificar en distintos territorios mapuche”.
Además, explicaron que el Gobierno no habría dialogado con igualdad de condiciones, mientras que Curipan manifestó que por primera vez los mapuche demostraron poder llevar adelante conversaciones pacíficas.