En esta ocasión, los equipos de las universidades estatales mencionadas, incluirán en su programación dirigida a las y los habitantes de San Vicente de Tagua Tagua los talleres «Todo sobre los dinosaurios», dictado para niños de entre 6 y 8 años, y «Clasificando dinosaurios y otros animales prehistóricos», para quienes tengan desde 9 a 12 años. Por su parte, la actividad será impartida por la experta Bárbara Aravena de la Red de Paleontología de la Universidad de Chile.
En ese sentido, la egresada de la Casa de Bello explica que en el taller, las y los asistentes podrán conocer más sobre dinosaurios de Chile y otros animales prehistóricos. También, niños y niñas aprenderán sobre la fauna que habitó nuestro país hace millones de años, aprendiendo a diferenciar especies, conociendo de sus características, modos de vida y enterándose de los últimos descubrimientos realizados por investigadores/as chilenos/as.
Para la reconocida divulgadora, la invitación al público es a asistir con muchas preguntas. A esto, advierte que, si bien se hablará de animales prehistóricos, con énfasis en los dinosaurios, la idea es promover la curiosidad e impulsar que niños y niñas se acerquen a la ciencia.
“Mi intención es que sea una actividad interactiva, en donde quienes asistan se sientan en confianza y libres de preguntar lo que quieran con respecto a la clase o sobre paleontología en general. Estaré encantada de compartir también parte de mi experiencia personal trabajando como paleontóloga”.
Dentro de este trabajo dirigido al encuentro con las comunidades, se destacará –a través de talleres educativos- la investigación científica que se realiza en la Región de O’Higgins, que ha permitido identificar al menos- 28 especies de animales y cómo era la vida de los primeros habitantes humanos de la zona central de Chile.
Laguna Tagua Tagua
En 1833, a causa de actividades agrícolas, la Laguna Tagua Tagua –ubicada a unos 10 kilómetros de la ciudad de San Vicente- fue secada completamente. Lo que no se sabía -por ese entonces- es que dicho lago, durante las edades glaciales, estuvo rodeado de un bosque tipo valdiviano y nordpatagónico, asociado a un clima frío y lluvioso.
Mucho menos que, en ese preciso lugar, se registró la interacción directa entre los primeros humanos que poblaron Chile central y la megafauna extinta en el Pleistoceno.
Un grupo de científicos, que incluye a los expertos de la Universidad de O’Higgins Erwin González y Natalia Villavicencio, retomaron antiguas investigaciones realizadas en el lugar, que han permitido reconocer 28 especies de animales y cómo era la vida de los primeros humanos en Chile central, entre los años 13.000 y 3.000, además de caracterizar los cambios climáticos ocurridos en los últimos 50.000 años.
“¿Qué hemos descubierto? Primero, Tagua Tagua representa los hallazgos paleontológicos de la mayor biodiversidad de animales y fósiles, de las edades glaciales del Pleistoceno, que actualmente viven en Chile y otros extintos, lo que es súper importante en términos paleontológicos”, comienza aseverando el académico del Instituto de Ciencias de la Ingeniería UOH, Erwin González.
El Doctor en Geología e Ingeniería Geológica asegura –además- que en términos paleoclimáticos, la Laguna Tagua Tagua representa 50.000 años de historia climática continua de Chile; mientras que, en términos arqueológicos, es uno de los sitios más antiguos de América del Sur con presencia humana temprana y que presenta evidencia robusta de dicha presencia.
“En términos más específicos, hemos encontrado gonfoterios, que son mastodontes sudamericanos; además de caballos americanos, ciervos extintos, entre otras especies”
Aun así, y pese a los alentadores hallazgos, lo cierto es que “hemos excavado muy poquito, prácticamente el 0,001%, una parte muy pequeña. Lo que podemos encontrar en un lago, que tenía 30 kilómetros cuadrados, es infinito. Podemos encontrar muchas, muchas cosas durante las próximas generaciones”, puntualiza Erwin González.
El experto de la Universidad de O’Higgins destaca que –actualmente- Tagua Tagua es un referente a nivel mundial, “uno de los sitios paleontológicos y arqueológicos más importantes que tiene Chile y América. Cada vez está tomando más fuerza. Lo que estamos haciendo nosotros es comenzar un nuevo proceso, sobre aquello que nos dejaron los investigadores anteriores, con nuevas tecnologías, más capital humano avanzado y más doctores especialistas en esta área”, finalizó.