Por dos semanas se extendió la suspensión de clases presenciales, según dio a conocer el ministro de Educación, Raúl Figueroa, incluyendo la anticipación de las vacaciones de invierno para las dos últimas semanas de abril, con la finalidad de que las salas de clases no tengan estudiantes.
La medida aplica para todos los establecimientos municipales, subvencionados y particulares pagados, así como también los jardines infantiles. Ante la decisión, el ministro dijo que el año escolar tendrá lugar hasta el 31 de diciembre, ya que según agregó, busca «asegurar que los aprendizajes de nuestros niños y jóvenes no se vean afectados».